Estableciendo métodos de medición para determinar la calidad del producto, que identifique los principales defectos de este, encontrando su origen y realizando la corrección necesaria, se conseguirá disminuir los costos de producción relacionados con la reelaboración, los retrasos y demoras.
Esta mejora en la productividad permitirá satisfacer las necesidades del cliente incrementando la rentabilidad de la empresa.
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